Reserva una plaza de aparcamiento y contribuye a reducir la huella de carbono

La huella de carbono es una preocupación real para cada vez más ciudadanos. En los últimos años, se ha registrado un creciente interés por la movilidad alternativa, los vehículos eléctricos o incluso por la adaptación de los viajes y el tiempo de ocio para reducir las consecuencias del cambio climático.

Los especialistas en la materia están de acuerdo en algo: tan solo con pequeños detalles que se incorporan al día a día se pueden lograr excelentes resultados. Y es que nunca ha sido tan real aquello de que cada uno aporte su granito de arena; acciones mínimas que tienen una gran repercusión en el futuro.

Por eso, en un contexto en el que no todo el mundo tiene la posibilidad de usar transporte público, o cambiar su coche de gasoil o gasolina por uno híbrido o eléctrico, existen algunos hábitos que pueden ayudar a reducir la cantidad de CO que se emite a la atmósfera, y una de las opciones más asequibles es la de reservar una plaza de aparcamiento antes de llegar al destino.

Aparcar contamina más de lo que crees

Aparcar el coche en una ciudad grande o mediana no solo eleva el estrés del conductor y le hace perder tiempo, sino que también es muy perjudicial desde el punto de vista medioambiental. Y es que en los minutos extra en los que el coche está dando vueltas a la manzana, o buscando calles menos transitadas para aparcar, el vehículo sigue emitiendo gases contaminantes que son perjudiciales para el medioambiente. Ahora solo hay que multiplicar esta acción, que seguramente sufras casi todos los días, por decenas de miles de vehículos moviéndose por la ciudad al mismo tiempo con ese propósito. Durante este tiempo es cuando más emisiones de CO₂ se generan.

Vamos más lentos

¿Qué es lo que suele hacer un conductor cuando no encuentra una plaza de parking en la calle o en un espacio delimitado para ello? Bajar la velocidad, reducir marchas e ir mucho más despacio.

Usar la velocidad reducida cuando se busca aparcamiento tiene una repercusión directa y muy negativa para la calidad del aire. Así lo determinan en el Instituto Flamenco de Investigación Tecnológica VITO, donde realizaron un estudio en 2011 que les permitió demostrar que a velocidades por debajo de los 40 kilómetros hora, la mayor parte de los vehículos gastaba más combustible y, por tanto, elevaba las emisiones.

Para solucionarlo, una de las mejores opciones es la reserva de un espacio de parking que hace que el usuario vaya directo al lugar determinado previamente y encuentre un espacio para dejar su coche en apenas unos minutos.

Esta reducción del tiempo de aparcamiento es ese pequeño grano de arena que se puede aportar desde mañana mismo gracias a aplicaciones móviles y empresas de gestión de aparcamiento, que hacemos posible la reserva de espacios gracias a la tecnología y a la aplicación de la inteligencia artificial.

Otros problemas derivados de la falta de aparcamiento

Los parques de vehículos han aumentado considerablemente en las últimas décadas. En contra de lo que han intentado los gestores de las grandes ciudades, con la ampliación de servicios de transporte público, los usuarios han optado por comprar un coche y utilizarlo diariamente, la mayor parte de las veces viajando como único ocupante del vehículo.

Esto ha hecho que la búsqueda de aparcamiento en ciudades como Sevilla, Madrid y Barcelona sean una realidad desesperante y que provoca más cantidad de estrés, grandes pérdidas de tiempo e incluso han elevado el índice de accidentes en áreas urbanas.

Además, otra consecuencia directa del uso del vehículo privado es que a más turismos en la carretera, mayor posibilidad de que se generen atascos y embotellamientos tanto en las zonas de acceso y salida de la ciudad como en las calles más concurridas de la misma.

Ventajas derivadas de la reserva de aparcamientos

Apparkya, portal para reserva de aparcamientos no solo ayuda a reducir, de media, entre 450 y 715 gramos de CO por vehículo y a no perder el tiempo, sino que incluye también otros beneficios asociados:

  • Mejora la seguridad: usar parkings con reserva permite que el usuario goce de un extra de tranquilidad, ya que, generalmente, estas plazas se encuentran ubicadas en espacios con vigilancia.

  • Ahorran dinero: aparcar en espacios reservados supone un menor riesgo de recibir denuncias por olvidar el pago del estacionamiento regulado. Además, el usuario puede gozar de descuentos y otros beneficios cuando se reserva desde Apparkya.

Coger el coche tiene un impacto directo en la huella de carbono. Por eso, conocer las posibilidades de la reserva de aparcamiento es vital para hacer que este daño que se inflige a la naturaleza sea lo más reducido posible. Incorporar este simple gesto en el día a día es contribuir a crear un futuro más ecológico, limpio y sostenible.