Técnicas de conducción eficiente que te ayudarán a ahorrar gasolina

¿Se consume más con una marcha larga o en punto muerto? ¿Es mejor abrir las ventanillas o usar el aire acondicionado? ¿Importa más el tipo de marcha que las revoluciones a las que llevemos el motor? Seguro que has oído hablar mucho de técnicas de conducción eficiente y ya sabes bastantes de ellas, pero hay ciertos aspectos que a veces se nos pasan por alto.

Aplicarlas te puede ayudar a ahorrar hasta un 30% en combustible. Un pellizco nada desdeñable sobre todo tras las fuertes subidas de su precio. Ahorro que también repercute a la reducción de las emisiones totales de CO2. En España, el 25% de estas emisiones provienen del trasporte, por lo que cualquier acción para disminuirlas es bienvenida.

Existen muchos tipos de técnicas de conducción eficiente, no solo las básicas de evitar frenar bruscamente o no pegar acelerones. Hay técnicas de mantenimiento, preventivas, al volante, según el tipo de motor… y también hay tecnologías que nos ayudan a ser más eficientes.

Antes de conducir

Antes de ponernos al volante es preciso tener nuestro coche preparado para evitar el desperdicio de gasolina. Las bujías o calentadores deben encontrarse en un perfecto estado de mantenimiento, así como los filtros de aire y el lubricante del motor. También es importante tener a punto los inyectores y el sistema de control de gases. Y algo que todos sabemos pero que muchas veces pasamos por alto, a pesar de su vital importancia: el mantenimiento de los neumáticos.

Técnicas de conducción eficiente preventivas

También antes de ponernos al volante hay una serie de técnicas de conducción eficiente que pueden ayudarnos a ahorrar. Sobre todo a la hora de realizar viajes largos. Planificar nuestra ruta y evitar las zonas más congestionadas son ejemplos de ello. En ciudad también hay técnicas preventivas, como reservar una plaza de parking con antelación y no dar vueltas buscando aparcamiento. Algo que puedes hacer con nuestra aplicación Apparkya. Así como estos consejos que puedes leer aquí.

Hay que evitar también el sobrepeso (cada 100 kilos de peso aumentan el gasto un 6%) y no llevar la baca instalada si no la vamos a usar, ya que aumenta el consumo un 10%.

Los mejores trucos al volante

Seguro que ya sabes que evitar frenazos y acelerones o usar marchas largas ayuda a conducir de forma más eficiente. Pero hay ciertos casos en los que podemos dudar en qué hacer. Por ejemplo, al bajar una pendiente, es mejor usar una marcha larga que el punto muerto. Y lo mejor es tener en cuenta las revoluciones por minuto de nuestro motor.

¿Bajamos las ventanillas o encendemos el aire acondicionado? Los días de más calor no hay más opción que recurrir al aire, pero en otras circunstancias puede que nos surja esta duda. Depende de la velocidad. A partir de 100 km/h., la aerodinámica nos dice que es mejor recurrir al A/C. Pero con mesura, sin convertir el interior del vehículo en un cubo de hielo, ya que en solo 100 kilómetros en carretera podemos llegar a consumir un litro de gasolina. También es beneficioso airear el coche antes de encender el aire, y no empezar a usarlo hasta que estemos en marcha.

Otras técnicas de conducción eficiente pasan por mantener una velocidad constante, sin cambios bruscos; apagar el motor si estamos parados más de 60 segundos; iniciar la marcha inmediatamente después de arrancar si nuestro coche es de gasolina, o esperar un poco si es de diésel; y usar la primera marcha solo para arrancar, cambiando rápidamente a segunda.

Tecnología para técnicas de conducción eficiente

Las nuevas tecnologías también se ponen al servicio de los usuarios para ayudarnos a conducir de forma más ahorrativa. Nuestros smartphones se pueden convertir en auténticos centros de conducción eficiente gracias a las muchas aplicaciones que se ajustan a ello. El mismo Google Maps nos da datos de tráfico y de mejores rutas para prever nuestro viaje. También hay otras para encontrar gasolineras más baratas, para llevar al día los chequeos que necesita el coche, para monitorizar el consumo… Y muchos vehículos ya incluyen sus propios sistemas de ayuda.